sábado, 6 de septiembre de 2008

Reencuentro

Hoy he reencontrado a una persona que no sabía cuanto echaba en falta. Ha sido estupendo tenerla de nuevo al alcance de un susurro y compartir con ella el tiempo, nuestro tiempo. Ya no recordaba como sonaba su voz, su risa, su sentido del humor... espero que permanezca cerca mucho tiempo.

Sin embargo también me ha recordado a aquellas que se fueron y aún no han vuelto, de las que apenas ya sé nada y de las que quiero saber tanto. En fin... en cualquier caso hoy ha sido un buen día y los pensamientos tristes no van a estropearlo, hoy es un buen día, y solo cabe esperar que continue habiendo otros pronto igual de buenos.

Mejor no decir más, es mejor esperar a que vuelva cada uno para poder comentar cada regreso, no anticipar nada ni forzarlo expresando los deseos de que ocurra.

lunes, 1 de septiembre de 2008

Nunca jamás

Más de uno recordará estas palabras;


"Cuando el primer niño rió por primera vez, su risa se rompió en mil pedazos que fueron rebotando, y ese fue el principio de las hadas. Y ahora cada vez que nace un bebé, su primera risa se convierte en una hada. Así que debería haber una hada por cada niño y cada niña."

"Cada vez que un niño dice:'Yo no creo en las hadas'; hay una hada en alguna parte que cae muerta"

La falta de ilusión y la desesperanza, la monotonía, la vida gris de la rutina que nos atrapa en el desánimo, eso es lo que mata nuestro hada. Cada ilusión que surge, cada risa y alegría le devuelve la vida, la reanima y da energías para seguir volando a nuestro lado.

Cuidemos de las hadas y no las maltratemos, sumerjámonos en risas y nademos en los colores de las ilusiones y la alegría de vivir que proporcionan. Llevemos nuestro hada con nosotros mientras recorremos el necesario camino de la rutina, coloreándolo, y olvidaremos su monotonía pues nuestro hada camina justo al lado.